Hi Fans. No, no he estado en un curso de inmersión
lingüística al otro lado del charco, ni pasado el término de mi villa. Me
apetecía saludaros en el idioma de una de mis ídolos a imitar. God Save The
Queen. Y a la Gin también. Para ella, que vosotros sabéis que yo soy de ron.
Hace dos semanas que no me paso por aquí, y no ha sido por
falta de ganas, ni de temas, ni tramas. Ha sido porque en este tiempo he pasado
a ser menos ni-ni. MENOS. No lancéis las campanas al vuelo. Algún día de estos
os contaré de qué se trata. Que hoy he venido aquí, a hablar de mi libro. Tampoco.
He venido a hablar de los Goya. Ya sé que es pescado vendido. Pero no lo he
podido hacer antes, y no puedo dejar pasar la oportunidad de dar mi opinión
sobre la gala. O sobre la manifestación. Llamémoslo X. Porque si algo tengo
claro, es que la Gala como ente, sufre una crisis de identidad. Vaya, que es un
renglón torcido de Dios, que diría Don Torcuato. El Luca de Tena.
Paso pues, al comentario puro y duro del día de marras. Por
partes.
Los premios
La noche fue en blanco y negro. Triunfadora de la noche:
Blancanieves. Era la favorita, así que no hubo sorpresas. Sobre la película no
puedo comentar, porque no la he visto. Crucificarme si queréis, pero a veces
soy humana y me pierdo peliculones como este. O no. Yo duermo muy tranquila.
Además que a mí el blanco y negro me recuerda a Tiempos Modernos, y me dan
parraques. Yo soy más del color. Y muy poco de la Verdú, que aunque a mi
hermana le encante, para mí siempre será la marisabidilla con gafas de maruja
de canguros. Yo era mucho más de la Marsó. No todo el mundo es apto para
presentar el Telecupón. Si en algo simpatizo pues, con la película ganadora, es
porque en ella sale Macarena García. Y me encanta. Si fuese de la acera de
enfrente, sería mi tipo. Creo, tampoco lo puedo saber. Es guapa y lista. Y
seguramente que sea madridista. O no, que tampoco es la cuestión. Sobre el
vestido de la Verdú no hare comentarios, que me he despertado de buen humor,
sobre el de Macarena diré que chapeau,
sobre su reloj, que aunque le han salido muchos fans, a mi eso pues no me
gusta, no es cómodo. Lucido sí, mucho. Pero cómodo… lo que se dice cómodo… A mí me molestaría un montón, para apoyarme en
la barra. Porque yo soy chica de barra. De bar, no americana. Aunque todo es
ponerse. Que si puede la Obregón… En fin, que me desvío, que Macarena todavía
me gano más, cuando se lo dedicó a su amor. Porque yo también se lo dedicaría
al mío. Aunque estaría durmiendo en casa cansadito y no enteraría, hasta las
noticias de las 2. Pero yo soy así, una romántica de las que ya no quedan.
Macarena, la Pantoja y yo. No muchas más.
Os hablaría de los demás premios, pero es que ya para que
nos vamos a engañar, no he visto ni Lo Imposible, ya que padezco de vértigos,
ni La Artista y la Modelo, porque aunque sale Fransuas, que me mola, porque con
ese nombre como no me va a molar, es de leer subtítulos, y yo soy lenta. Ciega
y lenta. Tampoco he visto Grupo 7 a
pesar de Mario Casas, y sus pectorales, y su sonrisa de medio lao. Ni Tadeo Jones, porque no tengo hijos. Así que sobre los
premios no tengo nada más que decir.
La presentadora
Pues eso, Eva Hache. Que así se lo aprendió ella. Y en
ocasiones resulta un poco cansina. Y ese pelo de reformatorio suizo… pues
tampoco ayuda. Los sketches, o lo que vienen siendo sainetes de toda la vida,
la de Dios y la mía, pues más de lo mismo. Mención aparte para el de la
peluquería, con María León, Macarena García, la nueva de Luna de Calenda –que no
me acuerdo como se llama y no me apetece buscarlo, pero que salía en Grupo 7-, y
Fransuas, que no es su nombre, pero que así se llama en Cuéntame, y para mi es
Fransuas. Algún día tendré algo con ese nombre. Lo que sea. Pero ese nombre yo
lo tengo que poner. No se puede tener más musicalidad. Fransuas.
También hago mención al sketch en el que actores y actrices hacían
el monguer, versionando la canción de la chica ye-yé. Casposo, casposo. Pobre
Concha, toda la vida esperando, para eso… Pero bueno, que la quiten lo bailaó,
ya tiene su Goya para pasarle el plumero.
Tampoco hablaré de los trajes de Eva, porque algunos sí que
eran pecados. Más que el original. Y seguro que los eligió ella sola. Sin
serpiente animosa. Por lo demás pues Eva no estuvo mal. Es un mandá. Tampoco es cuestión de machacar.
Los vestidos de las féminas
Las celebritis nacionales pasearon por la alfombra roja sus
vestidos. Algunas, otras no se lo que pasearon, veáse Candela Peña, que hija,
ya que vas a ganar y vas a subir, y te vas a lucir… Un poquito de por favor.
Otra cosita, mujer. Que ese vestido para ir a Eurovisión en los 80 y preguntar
quién maneja tu barca, pues todavía… Pero en pleno siglo XXI, como que no. Un
arg, como una catedral amiga.
Como no os quiero aburrir hablando de todos los vestidos,
solo os diré que me encantó Paula Echevarría, con un Dolores Promesas verde que
le quedaba como un guante. Que a la Obregón le debieron de reservar dos butacas
porque en una no cabía, porque eran dos, su vestido y ella. Que mi admirada, y
la de la cagada de la noche, Adriana Ugarte -La Señora-, iba como si fuese al
Retiro un día de primavera. Que Goya Toledo venía o de pegarse o de otras
cosas, porque ese pelo, muy normal no era. Que la Bardem no se de que iba
disfrazada, o dónde se pensaba que iba. Parece ser que a echar unos cartones al
bingo, porque sino no entiendo nada. Massiel, a tope de power, pá no
desentonar. Y creo que lo dejo aquí. Que
esto no es un blog de moda y belleza.
Dedicatorias de los premios
Termino con esto, porque si han hablado de ello hasta en el
Congreso, pues yo no voy a ser menos. Candela Peña, no fue trending topic en
twitter por su vestido, aunque debería, lo fue por su dedicatoria. Días más
tarde lo siguió siendo, porque parece ser que al padre no le falto de nada y
todas esas cosas que ya sabéis, y que eso fue hace tres años, cuando el actual
Gobierno no gobernaba. Yo ahí no me meto. Pero si me meto, para aplaudir el
gesto de aprovechar ese momento para pedir más trabajo. Si lo llego a saber, le
digo que también lo pida para mí. Bravo Candela, eso sí. Otro de las
dedicatorias que levantaron ampollas, fue la de Maribel Verdú, de cómo pasar de
anunciar hipotecas y las rebajas del Corte Inglés, a estar con los desahuciados,
todo ello vestida de Dior. Háztelo mirar Maribel. De Corbacho paso de hablar,
me cae más que gordo. Tú sí que no vales. Ni 21%, ni ná.
Y como se que lo estabais esperando, llega el momento de los
Bardem. Qué más puedo decir. Si es que cada vez que aparecen en la tele, los
voy odiando un poco más. Que queréis que os comente la pegatina que llevaba la
señora… Si es que me da una pereza hablar de esta gente. Bastante es que a
menudo les dedico un espacio en el blog. Que se den un canto en los dientes. O
con el puño en el techo. Como vean.
Para terminar, hablaré de Gabino Diego, porque comparto su
opinión. Yo también creo que la “gala de los Goya debe ser una fiesta del cine
y no de la política”. Y que “si te quieres manifestar, te vas a una
manifestación”.
Se cierra el telón
Chin, chin …
Que razon tienes. La verdad es que no se cuando la Gala de los Goya dejó de ser cinematográfica para pasar a ser cínica a secas.... Hay que tener mucho valor de subir a un escenario vestido con la mejores galas, y sin ningun tipo de problema económico para ponerse a hablar de crisis y política.
ResponderEliminarLo de Maribel Verdú es de antología. Ya lo dijo Darwin: la especie que sobrevive no es la más fuerte sino la que mejor se sabe adaptar al ambiente. En estos tiempos de amor líquido, Maribel encarna la ética líquida: hay que estar donde (mejor) se paga, bien sea en euros o en valoración de imagen. Es una mujer de nuestro tiempo.
ResponderEliminarComo me pasa con tus textos Vir, llega mi momento de confusión sobre el universo femenino: ¿prefieres a las mujeres protestando vestidas en trajes de Dior o a pechos descubiertos como las de Faten?
Recuerdo esta imagen de Giselle y resume la protesta de Maribel: o estás de modelo o sacas tu cartel en el lugar adecuado. A ver cómo nos adaptamos para sobrevivir en estos tiempos líquidos...
Muchas gracias a ambos por los comentarios. Me hace mucha ilusión que dejéis constancia de vuestras visitas a este mi ciberespacio compartido.
ResponderEliminarEspero que vuelvas María de los Ángeles.
En cuanto a ti, Diplopito (me permito la licencia de tutearte), una vez más estoy de acuerdo contigo. Coincido con tu teoría de ética líquida, y te agradezco el haberla compartido.
En cuanto a tu confusión, te responderé desde mi universo femenino, que puede que sea paralelo al resto, pero yo no prefiero ni a las que protestan vestidas en trajes de Dior ni a las que lo hacen a pechos descubiertos... Ya lo digo en el post, que yo prefiero a las que no protestan, sino que declaran su amor, vayan de Dior, o de Encarni García.
Espero haber resuelto tu duda ...
Saludos sólidos
Gracias Vir por tus saludos sólidos, te correspondo con un líquido chin chin ;-) ¿Hablarás en un próximo post de tu "menos que ni-ni"?
ResponderEliminarTe deseo una semana sólida (aunque no por ello menos fluida) y estaré pendiente de tu próximo brindis.