sábado, 31 de diciembre de 2011

Año nuevo, vida nueva

Lejos de historias navideñas como la tuya, Vir, he de decirte que mis navidades transcurren -y desde que tengo uso de razón, han transcurrido- con total normalidad. Es curioso, anoche pensaba todo lo que escribiría hoy, y hoy me siento sin saber bien qué decir. -Nota mental: apuntar mis notas mentales-.

Mientras los críos españoles empiezan a tirar petardos -gracias por recordarme que es Nochevieja, no me había dado cuenta-, aquí me encuentro yo, haciendo repaso de lo que me ha traído este año. Un tanto absurdo, pues, lejos de los repasos anuales, donde todo queda un poco en el aire, es mejor hacerlos diarios. Sólo así de verdad nos damos cuenta de las cosas e intentamos cambiarlas, o conservarlas, según se mire.

Remembering 2011

Lo primero que hay que hacer es
brindar por habernos re-conocido este año, Vir. Un chin chin por los reencuentros. Yo además brindo por haberme quedado sin verano. Ahora de verdad puedo decir que eso jamás volverá a pasar. También por haber cruzado el océano y por haber tenido la oportunidad de conocer el olor a vida en la piel de mi sobrino, recién nacido.

Un brindis también por haber sabido discernir "la absurdez" en mi vida -sí, ya os digo desde aquí que he hecho cosas más inútiles que la R de Marlboro-. Y por el triunfo de la verdadera amistad, ya que no lo hace el amor, y menos después de haber perdido ayer el pedrusco del anillo de mi hermana que simbolizaba "el amor". No, Vir, yo no tengo ningún Clark Kent, ni siquiera un Peter Parker -que ha tenido siempre pinta de ser más pringui que Superman-. Me conformaría con un Bruce Wayne, un caballero oscuro super Ryan Gosling look alike, pero como la avaricia rompe el saco, me quedo tal y como estoy, y que la vida me de o me quite lo que sea menester, que para eso está el Karma. Yo, sin prisas, como Cayetana, que parece haber encontrado el amor de su vida. Juro que si me sucede lo mismo, yo también me arrancaré a bailar, tenga la edad que tenga. Esa sí que ha sido la boda del año y no la de Mónaco o la de Inglaterra.

Ni que decir tiene que yo paso de toda esa gente que dice: "ais, 2011, te echaré de menos".... "ais, no te acabes", "ais que 2012 sea tan bonito"... Pues, ¿sabéis que os digo? bonito o no, mejor o peor, hay que tirar pa´lante, como los de Alicante. Si algo he aprendido es que de nada vale anclarse en el pasado, quedarse esperando a que tiempos mejores vuelvan o lleguen porque, vale que el Karma sea la verdadera Liga de la Justicia, pero también un poco de cera le tenemos que dar nosotros mismos... ¿o no? Si no, luego lloraremos más que los coreanicos en el entierro de Kim Jong-Il -uno de los más trendies- y con razón -lo de llorar, no lo de ser un prescriptor de la moda. Eso jamás-...


Yo, que siempre he visto el vaso medio vacío, he cambiado el chip. Hoy lo veo medio lleno. Que pierdo el pedrolo del amor, pues bueno, también perdí la cabeza y la recuperé. Pas de problème! Yo, desde mañana mismo, empiezo una nueva vida. Porque creo que ha llegado mi oportunidad, y que tras esta vendrán muchas más -y mejores-. Ya os iré contando...

Mis fuerzas y deseos más positivos para todos vosotros ¡Feliz 2012! ¡Salud!


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